domingo, 8 de diciembre de 2013

Hasta los perros están invitados
Al compás de música folk se da la bienvenida en un viejo taller mecánico que ahora funciona como pensión de autos. La gente ríe y se deja llevar por el encanto del momento. Amigos, parejas y familias enteras se reúnen para conocer este innovador concepto que está rodando por las calles de la ciudad de Mèxico: los Food Trucks.

Los Food Trucks ofrecen una gran variedad de platillos, además de contar atractivos diseños que acaparan las miradas de los asistentes. Estos camiones de comida han decido salir a las calles de manera pacífica, organizándose y creando una fraternidad bajo un mismo concepto.

“La idea comenzó en la ciudad de Chicago cuando yo tenía 12 años. Realicé una inversión de medio millón de pesos para comprar el camión y acondicionarlo. La idea era hacer un negocio familiar y juntar dos conceptos que nos gustan: la música y el folklor mexicano”, mencionó Carlos Guzmán, director de mercadotecnia de Rockin’Taco.

Se organizan ferias donde los Food Trucks se parquean rentando lugares como estacionamientos públicos, talleres mecánicos y pensiones de autos para ofrecer sus productos a los clientes ante la pasividad de las autoridades, quienes solo argumentan que no existe una ley que regule este tipo de actividad.

“Estamos en el limbo. Se está planeando una iniciativa impulsada por el PAN y el PRD donde según nos otorgarán permisos. Somos casi 35 camiones tan solo en el D.F. Hemos acudido a las delegaciones Benito Juárez, Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero y pues es obvio que no queremos fomentar la corrupción, porque terminas trabajando para esos cabrones, aclaró Guzmán.

Los dueños de los Food Trucks aconsejan seguir sus cuentas a través de redes sociales para que la gente sepa en qué puntos pueden localizarlos. Entre la gran variedad de Food Trucks se encuentran: El Baudín, La Bocana, Nómada, El Camioncito, Rockin Taco, Primario, Kebabs, Ñhám-Ñhám, El Buen Burgués, Marquesería, Barra Vieja, Biaggio, Genko Café y Pink Lem.

“Teníamos un restaurante y pensamos en llevarlo a toda la gente. La terraza que se dispuso en el camión por la noche se ve muy padre, pero la actividad no está regulada, y claro, estamos en contra de fomentar la corrupción”, señaló Fernando Fonseca, socio de Biaggio.

En las ferias de Food Trucks se mezclan diversos aromas e ingredientes. Las familias ríen, las parejas se besan y los perros olfatean en busca de comida; miradas fugaces, el tono perfecto para pasar un momento agradable y conocer una propuesta diferente que navega por las calles en busca de paladares cansados de lo cotidiano.



martes, 19 de noviembre de 2013

Ganas de comernos al mundo

Las formas en que ahora nos organizamos y nos comunicamos mediante las nuevas plataformas digitales y el uso de las redes sociales han cambiado las maneras en que ahora se concibe el concepto de trabajo. Trabajar ahora se ha convertido en un proceso dinámico, innovador y divertido donde las debilidades de un colaborador se pueden complementar con las fortalezas de otro.

La tecnología responde ahora a las nuevas plataformas de consumo que se dan en el contexto global digital. Las relaciones se basan ante todo en el compromiso y la responsabilidad para con el otro. “Tú necesitas lo que yo tengo, y yo necesito lo que tú tienes”.

De acuerdo con Alvin Toffler, escritor y teórico norteamericano en su libro La tercera ola, define el término prosumidor, el cual nos hará comprender las nuevas formas de consumo en el entorno digital: “Los prosumidores son personas que consumen lo que ellos mismos producen; en lugar de venderlo, es para su propio uso”.

Julián Woodside, catedrático del Claustro de Sor Juana ha comentado acerca de cómo internet es un mero reflejo de la sociedad, de sus pautas de comportamiento y evolución a través de las nuevas tecnologías de información en comunicación (TIC).

Lo subraya acertadamente Jesús Galindo: “El ciberespacio es un escenario donde múltiples sistemas de información tienen un nuevo nicho para difundirse, a gran velocidad, con impecable fidelidad”.

Atrás ha quedado la imagen de aquel personaje intelectual encerrado con un mundo de conocimientos tras cuatro paredes; compartir es la premisa en “la era del conocimiento”. Es inevitable imaginar al arquetipo de “Godínez de oficina”, vistiendo trajes que no son de su agrado y haciendo todo aquello que no le gusta hacer.

El coworking busca generar ideas innovadoras de calidad y crear plataformas de vinculación por medio de talentos creativos. La tecnología construye nuevas redes de “mercados de confianza”. La “inteligencia social” puede ser definida como la importancia de rodearse de personas que estén interesadas en compartir objetivos comunes y existe una premisa en estas nuevas formas de trabajo: rodearse de personas más inteligentes.

Perder el miedo para alcanzar el éxito, arrojarse el vacío, caer y levantarse, aprender de los fracasos, sacudirse el polvo y levantar la cara son algunas frases que se estilan en las reuniones de emprendedores. El coworking trata de resaltar la importancia de las relaciones humanas en los procesos de trabajo. Las organizaciones ahora parten de la premisa de tomar acciones indispensables para satisfacer necesidades de acuerdo con la información del mercado.

El coworking o trabajo colaborativo fue un término acuñado por Bernie DeKoven en el año 1999, pero fue Brad Neuberg quien realmente lo difunde en 2009, ya que es a él a quien se le atribuye el primer espacio de coworking en San Francisco llamado “Hat Factory”.

Jeff Howe, editor y colaborador de la revista especializada en tecnología “Wired” publicó en 2006 un artículo llamado “The rise of crowdsourcing”. Howe expone en su artículo el poder de convocatoria que tienen ahora las multitudes con el uso de las nuevas plataformas digitales y define el crowdsourcing como:

"La externalización, por parte de una empresa o institución, de una función realizada por un empleado a un grupo indefinido (y normalmente grande) de personas mediante una convocatoria abierta. Esta externalización puede tomar la forma de una producción-de-iguales cuando el trabajo se realiza de forma colaborativa, pero también puede llevarse a cabo de forma individual".

El coworking particularmente está dirigido a los trabajadores independientes (freelance), a las personas que trabajan usando el teletrabajo o a los emprendedores. Difícilmente un emprendedor cuenta con el capital necesario para invertirlo en su proyecto y ejecutarlo a corto plazo.

El coworking permite trabajar por proyectos sin necesidad de contratos ventajosos compartiendo costos y ganancias en porcentajes proporcionales para cada miembro de la organización. El coworking permite y fomenta la independencia y libertad al momento de llevar a cabo un proyecto.

Una de las ventajas del coworking es que te permite trabajar desde cualquier lugar que tenga acceso a internet, haciendo uso de las nuevas plataformas digitales. Ya no es necesario pasar de 8 a 12 horas en la oficina. El trabajo colaborativo permite administrar el tiempo, horas de trabajo y fechas de entregas de los proyectos. Aquí ya no tendrás que soportar los gritos desesperados de tú jefe; aquí tú eres el jefe.

Los espacios de coworking permiten entablar relaciones personales afines, conformando y organizando equipos multidisciplinarios de trabajo. Además permite compartir y ahorrar costos, ya que los espacios destinados al coworking están equipados con todas las necesidades que pueden existir en una oficina: sala de juntas, conexión a internet, instalaciones cómodas y un ambiente relajado de trabajo.

En México últimamente se le ha dado mayor espacio y difusión al desarrollo y futuro crecimiento de la cultura emprendedora. Lugares como Startup Weekend se postulan como la mejor experiencia educativa para emprendedores.

Startup Weekend es una red global de líderes y emprendedores apasionados con la misión de inspirar, educar y empoderar a las personas, equipos y comunidades sobre cultura emprendedora El espacio invita a compartir ideas, formar equipos y crear startups.

O Startupdrinks, cuyo objetivo es reunir un mundo de ideas bajo un mismo techo, donde mes a mes, la comunidad emprendedora se da cita en distintos bares de la república mexicana; el único requisito es traer un concepto innovador y compartirlo con personas de mayor experiencia -conocidos como mentores- para saber cómo le han hecho, buscando crear sinergia de conocimientos y ofrecer soluciones de negocio.

A estas reuniones asisten diversidad de personajes, desde estudiantes deseosos de conseguir financiamiento para llevar a cabo sus proyectos, así como mentores, inversionistas, aliados estratégicos y viejos lobos de mar dentro de la cultura emprendedora. Se platica bajo el calor de una copa mientras la música suena bajo las luces tenues; la finalidad es romper el hielo. Sorbo tras sorbo, el conocimiento fluye de una boca a otra.

Una startup se define como una organización de carácter multidisciplinario, donde se sugiere que en menos tiempo, con poca cantidad de recursos, pero que cuenta con una gran cantidad de conocimientos, se encuentre el mejor modelo de negocio, para después, con la ayuda de un “ángel” se ponga a disposición el capital de inversión necesario para impulsar el proyecto.

Estos eventos generalmente son patrocinados por incubadoras de empresas, principalmente dirigidas por personas que están dispuestas a invertir su dinero, siempre y cuando la idea sea atractiva y redituable a corto, mediano y largo plazo.

Los emprendedores solo cuentan con una idea, pero esa idea podría ser capaz de revolucionar al mundo. El conocimiento, ante todo, debe compartirse en la llamada “era del conocimiento”. Es el nuevo orden mundial que se establece tras el monitor, el lugar donde no existen las banderas, y las guerras se llevan a cabo a golpes de teclado.

La innovación es trabajar para que las cosas sucedan; no esperar, sino buscar la oportunidad. La innovación fomenta y acompaña los cambios en una organización, pero necesita de otros factores como diversión, pasión y espíritus aventureros que buscan el crecimiento fomentando las relaciones abiertas, pero sobre todo, la comunicación.

Tom Serres, CEO de Rally.org y quien por medio de su organización se encarga de recaudar fondos para llevar a cabo acciones sociales en beneficio de las personas más necesitadas menciona:

“Todos queremos ayudarnos. En este mundo hay lugar para todos. Más que maquinas necesitamos humanidad; la gente tiene el poder de crear la felicidad. Sin valor no puedes hacer nada, debes tener el valor para seguir adelante; coraje para ponerte de pie por lo que crees”.

Por medio de la comunicación y la organización, estos nuevos equipos de trabajo buscan la manera de conformar sus propios equipos colaborativos y creativos. La comunicación permite integrar los recursos necesarios y analizar las necesidades organizacionales destacando la importancia de esta disciplina como factor estratégico para la organización.

La comunicación permite planificar y diseñar las acciones pertinentes con la finalidad de desarrollar un plan estratégico, con la finalidad de que la organización obtenga el retorno de inversión mediante la Propuesta Única de Venta. En suma: qué te ofrezco y qué me puedes dar, una especie de trueque en este paraíso digital.

Los emprendedores no precisamente lo que buscan es tener una cuenta abultada en el banco que les permita darse una vida de grandes lujos. Stanley Yang, después de haber puesto a la venta su empresa Triscend pudo haber tirado la toalla, pero decidió seguir en la pelea.
“Esta vez la cuestión no solo sería hacer dinero, quería un objetivo más grande: hacer algo en pro de la especie humana”, comenta Yang.

Son personas con ganas de comerse al mundo, no solo movidos por interese económicos, sino también por razones sociales. El conocimiento no puede permanecer inmóvil en el entorno digital contemporáneo.

El comunicólogo no puede ser ajeno a los avances tecnológicos, ya que ante todo debe tener la noción sobre el manejo del conjunto de técnicas, el denominado know how de las herramientas digitales para el desempeño adecuado de su profesión. Hoy la información llega a cualquier rincón del planeta en cuestión de segundos en la “aldea global”.

Hernán Moral en su libro Guía de orientación en el presente: hitos para la comprensión de la tecnociencia en la sociedad del conocimiento, menciona:

“Nuestras sociedades están cada vez más cómodas con la idea de que estamos ante un conjunto de nuevas reglas que constituyen un nuevo mapa de la realidad y, en consecuencia, un nuevo mundo, con la ventaja añadida de que este mundo se puede explorar sin salir de casa, con lo que uno puede ser cosmopolita en pantunflas, ganando batallas contra la injusticia a golpes de click.

“Pero esta perspectiva es tan tranquilizadora como falsa, ya que la era del conocimiento, esta Arcadia global, está siendo cartografiada por quienes la diseñan y la llenan de reglas, estableciendo sus límites y delimitando sus márgenes. Y eso no lo están haciendo, en general, los hippies del ciberespacio, sino las grandes corporaciones, oligarquías y grupos de poder a los que les interesa urbanizar este nuevo territorio para perpetuar su dominio; la construcción de un presente, de un mundo, no es tarea aleatoria ni ingenua”.

Hoy es posible establecer relaciones, proyectos y negociaciones del otro lado del mundo con solo presionar una tecla del ordenador. Son las ventajas del coworking o trabajo colaborativo. La revolución tecnológica ha transformado la manera en que ahora nos comunicamos y nos organizamos para trabajar en la era digital.

Ahora se habla de “consumo colaborativo” o de “capitalismo socialista” en el entorno digital, donde varias personas se unen para adquirir un bien o servicio. El futuro ha congregado al poder de las multitudes para presenciar que el mundo está cambiando más rápido de lo que pensamos.




jueves, 14 de noviembre de 2013


El dilema de la innovación

Desde que el hombre habita la tierra, ha tenido que apostarle al factor innovación para sobrevivir. Esta idea propone la constante lucha que ha dividido el pensamiento humano a lo largo de la historia; cada postura defiende a capa y espada su propia concepción del mundo.
Desde que el hombre sale de la caverna-alegoría de Platón- está destinado a conocer y a cuestionarse el por qué de las cosas. Esto supone rebasar la delgada línea que existe entre innovarse o morir, entre modernidad y viejo orden. En el mundo de las organizaciones ocurre algo parecido.
La organización es un sistema vivo y comunicante, respira y siente los embates del mundo globalizado que se encuentra en constantes cambios y paradigmas. Los sistemas sociales tienen que sufrir modificaciones para permanecer en el tiempo pues el mismo se presenta como exigencia del aparato productivo a fin de que subsistan y sigan replicándose permitiéndoles la existencia.
Las organizaciones que no se adaptan a los cambios de la modernidad están destinadas a desaparecer .En el caso de Telmex se jugaba esta apuesta. La paraestatal tuvo que ser vendida al capital privado debido a su incapacidad de seguir compitiendo y absorbiendo los gastos de infraestructura; necesitaba aliarse de la tecnología y convertirse en una empresa de telecomunicaciones propiamente dicha.
Se contaba con el capital de Grupo Carso para hacerlo, pero Telmex debía sufrir una reestructuración que le permitiera existir, aquí la comunicación mantuvo un papel de suma importancia para lograr el objetivo que se trazo la organización.
Telmex es la más grande empresa de Telecomunicaciones en nuestro país. Tuvo la visión de encarar los cambios que el mundo global le exigía y se vio en la necesidad de planear una estrategia para conocer a fondo la problemáticas y plantear las soluciones que la organización necesitaba implementar.
Se vio forzada a innovarse para no perderse en la vorágine de la historia. Parece que pasó la prueba de ácido pues hoy representa una de las opciones más eficientes en servicios de telefonía para los mexicanos.
El cambio de cultura organizacional era inevitable, se necesitaba cambiar esa vieja percepción de que la empresa ofrecía un servicio deficiente y adaptar las herramientas tecnológicas, de capacitación y de comunicación interna como externa para fomentar un clima laboral favorable, comprometido, con liderazgos y valores bien establecidos dentro de la organización. Telmex arriesgó e innovo dejando el viejo orden a un lado, jugó la carta del progreso y todo parece indicar que ganó la partida.

“Los ojos no pueden conocer la naturaleza de las cosas”
Lucrecio
Comunicando en la era digital

Los cambios experimentados por el hombre a través de su existencia se han visto enmarcados por una constante evolución y la tecnología no ha sido la excepción. El ser humano se ha valido de la misma para subsistir y cubrir sus necesidades con el paso del tiempo. La tecnología supone una extensión de la esencia humana; de la realidad en la que vive, permitiéndole redescubrirse paso a paso y revelar así el mundo que le rodea.

Hoy, el ser del siglo XXI se encuentra situado en la era digital, en donde sus aristas evolutivas son enormes. Los límites comunicativos no existen, solo la moral y la ética regulan los mismos en esta nueva sociedad expandida. En cada click se abre la posibilidad de visitar un nuevo mundo, de ser navegantes descubriendo una infinita marea de posibilidades en la red.

Internet ha sido absorbido por el mundo como una herramienta de uso común. Suya es la obra, pero a la vez permite tener una nueva visión cultural sobre las personas que la emplean, de sus interacciones y de sus construcciones sociales, siempre en constante evolución. Hoy como seres virtuales vamos dejando infinidad de huellas por el mundo digital.

Julián Woodside hablaba acerca de cómo internet es un mero reflejo de la sociedad, de sus pautas de comportamiento y evolución a través de las nuevas tecnologías de información en comunicación (TIC). Lo subraya acertadamente el catedrático Jesús Galindo: “El ciberespacio es un escenario donde múltiples sistemas de información tienen un nuevo nicho para difundirse, a gran velocidad, con impecable fidelidad”.

Internet puede definirse como una red informática de ámbito mundial que, globalmente, ni pertenece ni está controlada por nadie; es un medio electrónico de comunicación e información, por tanto altera la forma de pensar y de actuar del hombre.

La información ha transformado nuestro modo de vivir, de pensar, de producir, de consumir y de morir. Grandes descubrimientos ha enmarcado al mundo, la introducción del alfabeto, la imprenta de Gutenberg, y ahora puede decirse que Internet encarna los valores libertarios de su creación, ya que es una ampliación tecnológica de la esencia humana.

Esencia es la constante construcción del ser. El ser humano es cambiante, adaptable a los tiempos, modas y tecnología. Internet nos crea la sensación de una nueva identidad, un refugio en el cual podemos sentirnos a salvo de los ajetreos cotidianos, una válvula de escape donde se adquiere una nueva personalidad detrás del ordenador.

Dentro de la denominada red de redes convergen diversidad de pensamientos y se persiguen infinidad de objetivos particulares o colectivos. Se ha introducido un nuevo lenguaje y se han establecido neoculturas. Es una nueva forma de organización social que tiende a expandirse por todo el planeta, transformándolo en una nueva ciudad.

No debe negarse que internet es un mundo de información y nuevos horizontes. Los peligros que implica adentrarse en este mar de posibilidades están a un click de distancia. Es menester establecer que la red no es algo distinto al mundo real, únicamente debemos percibirla como una extensión del mismo. No deja de ser un pequeño mundo que se expande día con día; pero este mundo es absolutamente humano.

domingo, 20 de octubre de 2013

Amanecer en el infierno

La redención no existe para tipos como yo; estoy lo bastante ocupado en mantenerme lejos de la cárcel. En el edificio solo viven drogadictos, alcohólicos, chulos y putas, generando un panorama lo bastante amplio sobre la miseria de nuestras vidas. Inevitable es despertar a cualquier hora del día después de un pinchazo en la vena del brazo izquierdo, asqueado, sórdido y angustiado; suplicando una dosis más, esperando un día no abrir los ojos y despertar en el infierno. El mundo que habitaba, no era un mundo humano, tal vez por eso buscaba la muerte a cada instante.

jueves, 3 de octubre de 2013


Bebiendo el conocimiento 

El objetivo de Startup Drinks es reunir un mundo de ideas bajo un mismo techo, donde mes a mes, la comunidad emprendedora se da cita en distintos bares de la república mexicana; el único requisito es traer un concepto innovador y compartirlo con personas de mayor experiencia -conocidos como mentores- para saber cómo le han hecho, buscando crear sinergia de conocimientos y ofrecer soluciones de negocio.
A estas reuniones asisten diversidad de personajes, desde estudiantes deseosos de conseguir financiamiento para llevar a cabo sus proyectos, así como mentores, inversionistas, aliados estratégicos y viejos lobos de mar dentro de la cultura emprendedora. Se platica bajo el calor de una copa mientras la música suena bajo las luces tenues; la finalidad es romper el hielo. Sorbo tras sorbo, el conocimiento fluye de una boca a otra.
Los orígenes de este movimiento se remontan a Francia, cuando Vincent, impulsor de este proyecto en México, a través de su andar por otros países, se dio cuenta sobre la forma de trabajar con la finalidad de impulsar ideas innovadoras.
“Los emprendedores se reunían en un lugar determinado, cuando al toque de una campana, la cerveza comenzaba a correr, facilitando de esta manera la convivencia y el establecimiento de contactos. Es una forma innovadora de trabajar, porque debo decirte que las incubadoras de empresas no sirven”, explica Vincent.
Una startup se define como una organización de carácter multidisciplinario, donde se sugiere que en menos tiempo, con poca cantidad de recursos, pero que cuenta con una gran cantidad de conocimientos, se encuentre el mejor modelo de negocio, para después, con la ayuda de un “ángel” se ponga a disposición el capital de inversión necesario para impulsar el proyecto.

jueves, 26 de septiembre de 2013


El hastío 

Aquella noche solo le restaba su miseria. La lluvia caía despacio sobre su lánguido cuerpo, indolente. Su pálido rostro se reflejaba sobre los charcos de la lúgubre calle vacía. Las manos heladas. Caminó sin rumbo solo escuchando la soledad de sus pasos asfixiantes. Encendió su último cigarrillo y saboreo el dulce aroma del tabaco tratando de engañar su angustia y arrebatarle un soplo m
ás de vida. Lo que buscaba a cada instante, sin saberlo, era la muerte. Prefería ignorarlo, era menos doloroso para él. Un fútil y leve descenso hacia el vacío. La mirada vaga y fría; la respiración desesperada. No dice una palabra, calla. El silencio agobiante, la mente que no para de ladrar. A lo lejos, una hermosa dama de negros cabellos toca las desafinadas notas de un viejo saxofón; la mira con sus ojos tristes, demacrados. Por instantes siente la ilusión de que aún es capaz de sentir y apreciar lo bello: el caos cotidiano, la eternidad del momento, lo fugaz de la vida. No deja de pensar en que solo le importa el hoy, porque el mañana aún es incierto y no le pertenece.vi